24/1/10

Estudiando



Si es que más razón no podría tener esta viñeta. Uno de los motivos por los cuales decido detener el tiempo en este blog es por los estudios, aunque sería más correcto decir por el estrés que me causa llevar a buen puerto los proyectos y las cosas que hago teniendo además que estudiar. Luego lo piensa uno fríamente y se da cuenta de lo poco que se consigue estudiando si no se tiene suerte. Me refiero a que tener carreras, masters o diversos títulos no te garantizan nada en esta vida, salvo eso sí, realización personal. Cuesta creer la cantidad de compañeros ópticos puteados que hay ahora mismo, cobrando sueldos paupérrimos y haciendo labores más propias de un comercial que la de un profesional sanitario, aunque bueno, esto último por desgracia está ya bien asumido en la sociedad. Parece que si le preguntas a cualquiera por la calle cuál es la labor de un óptico te dirá que vender gafas. Y no es ni mucho menos algo malo, es algo incompleto, segado, que no hace sino restarle valor a una profesión compleja como tantas otras.

Por eso a veces me desanimo estudiando. Pero al final hay que sacar de lo malo algo bueno, y la idea en este caso es que el mundo es un enorme mercado donde para triunfar hay que venderse, y los estudios, los títulos y toda la educación es algo que te enriquece como producto. Empiezo a hablar como Risto Mejide así que voy a seguir estudiando, sólo espero que no me termine pasando como al del anuncio que dejo a continuación. Nos leemos. 





Consejo de óptico: No tenía que haberme comprado otro ordenador, la tentación de probarlo y de paso volver a escribir en el blog ha sido demasiado fuerte. Otro día os aburriré un poco contando las labores de un optometrísta.