8/5/09

Fiestas de Caravaca (los Caballos del Vino)

El pasado fin de semana estuve en Caravaca para conocer la fiesta de los Caballos del vino y Los Moros y Cristianos. El 2 de Mayo tuvo lugar la primera. Ese día todo el mundo se viste con camisa blanca y pañuelo rojo (un poco al estilo de San Fermín) mientras se bebe vino dulce y se baila al ritmo de las numerosas comparsas. Por cierto, la imagen a la izquierda de la pantalla es uno de dichos caballos del vino. Las peñas de la ciudad se pasan todo el año preparando los ornamentos para sus caballos y con el paso de los años han logrado crear mantos de gran belleza como este. En sus dibujos se representan escenas típicas de la época de la reconquista pero con rostros conocidos de vecinos de la ciudad plasmados en ellos. La tradición de esta fiesta tiene que ver con una leyenda. Al parecer durante un asedio árabe a la ciudad los asaltantes se vieron obligados a envenenar las aguas de las que se nutría Caravaca con el fin de rendir a los habitantes. Sin embargo un grupo de caballeros (templarios, creo) salieron de la ciudad por la noche atravesando las líneas enemigas para encontrar agua que llevar a la ciudad. Al cabo de un tiempo lo único que encontraron fue una bodega de vino por lo que cogieron todo el que pudieron y volvieron a la ciudad entrando a la carrera. El vino fue bendecido con la Cruz y los habitantes se salvaron, incluso los que estaban enfermos por el veneno sanaron. Hoy en día se festeja esa carrera hasta la ciudad. Cuatro caballistas toman las riendas del caballo mientras corren a su lado hasta lo alto del Castillo. Van por turnos y el que llega en el menor tiempo recibe un premio. Hay también otro premio, otorgado por un jurado, para el mejor manto de ese año.
Tengo que decir que el ascenso de los caballos es bastante peligroso porque estos suben muy nerviosos ante la presión de tener que correr rodeados de público (muchas veces demasiado público). Nosotros tuvimos mala suerte y nada más entrar en el recinto para ver la carrera nos encontramos con un caballo desbocado que arrolló a una pobre mujer. Os prometo que impresiona bastante.
El 2 de Mayo es pues un día de mucha alegría, vino y emoción. Lo mejor, y es con lo que yo me quedo, es ir bailando y cantando con los amigos durante el pasacalles que hace la comparsa mientras se acompañan a los caballos a donde empiezan las carreras. Como las carreras acaban pronto el resto del día es para relajarse, comer bien y seguir tomando vino dulce de Caravaca. Al menos hasta el anochecer, momento en el que sale un desfile de moros y cristianos. Es estupendo ver una ciudad como Caravaca de noche, es como estar en el pasado medieval.







Continúa con un artículo sobre el 3 de Mayo.

Consejo de óptico: Nunca haré apología del vino dulce, pero si negara que está bueno sería un cínico.

2 comentarios:

  1. Qué bien me lo pase el 2 de mayo, pero qué de gente habia!!! A ver si la proxima vez que vayamos no hay tanta peña y podemos ver mejor las carreras de los caballos.

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  2. Aqui en Caravaca se visten con el pañuelo y faja al cuello desde el siglo XIX,en que hay constancia documentada. Creo que en Pamplona en las Fiestas de San Fermín, lo hacen solamente desde despues de la Guerra Civil. Por lo menos asi lo hizo constar en una conferencia aqui en Caravaca su Concejala de Festejos hace unos años. Por lo tanto y sin menospreciar a las estupendas Fiestas Navarras aclaración resuelta y que no se moleste nadie.

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